Beneficios del aluminio reciclado

El aluminio es un metal dúctil y no magnético y uno de los materiales más versátiles y abundantes de la Tierra. Por masa, es el tercer elemento más extendido después del osígeno y el silicio, y se reconoce por su baja densidad, alta relación resistencia-peso y propiedades resistentes a la corrosión. Además, el aluminio es totalmente reciclable, ofreciendo ventajas tanto en rendimiento como en sostenibilidad en aplicaciones de ingeniería.

El reciclaje de aluminio consiste en volver a fundir material de desecho para separar y recuperar aluminio utilizable. De forma sorprendente, aproximadamente el 75% de todo el aluminio producido —casi mil millones de toneladas— sigue en uso hoy en día.

Al seleccionar materiales para cumplir con los requisitos del proyecto, el rendimiento de las piezas es una consideración crítica. Las propiedades materiales desempeñan un papel importante en la determinación del éxito o fracaso de un componente. El aluminio puede reciclarse repetidamente sin perder sus características mecánicas o físicas, lo que le permite funcionar en las mismas aplicaciones al mismo nivel que el aluminio primario extraído del mineral de bauxita. Al mismo tiempo, contribuye a la sostenibilidad ambiental y ayuda a reducir el coste total.

Mantener el mismo rendimiento y propiedades físicas con el aluminio reciclado

En muchas aplicaciones, el término reciclado sugiere una reducción en la resistencia o el rendimiento. Aunque algunos materiales presentan propiedades mecánicas disminuidas tras ser reutilizados, el aluminio —al igual que el acero— conserva toda su resistencia, durabilidad y resistencia a la corrosión a través de ciclos repetidos de reciclaje. Esto garantiza que el aluminio reciclado rinda al mismo nivel que el aluminio primario.

El aluminio es infinitamente reciclable y conserva sus propiedades sin degradarse. Aunque ciertas industrias como la aeroespacial requieren las características precisas del aluminio virgen, la mayoría de las aplicaciones pueden alcanzar el mismo nivel de rendimiento, durabilidad ligera, resistencia y resistencia a la corrosión utilizando aluminio secundario reciclado. Para componentes que requieren alta resistencia y durabilidad a temperaturas elevadas, excelente conductividad térmica y estabilidad dimensional con paredes delgadas, el aluminio reciclado proporciona una solución probada y fiable.

Ahorro de costes utilizando aluminio reciclado

Extraer aluminio del mineral es un proceso intensivo en energía y costoso. La bauxita en bruto se refina en aluminio puro mediante electrólisis, un método que consume una gran cantidad de materia prima y energía para un rendimiento relativamente bajo. De media, producir un kilogramo de aluminio requiere aproximadamente cuatro kilogramos de bauxita y entre 190 y 230 megajulios de energía. El reciclaje del aluminio requiere solo alrededor del 5 por ciento de la energía necesaria para producir aluminio primario. En la fabricación, el alto coste de producción de materias primas suele repercutir al cliente. Sin embargo, incluso teniendo en cuenta los costes de recogida, separación y reciclaje, el uso de aluminio reciclado puede reducir los gastos de materias primas y energía hasta en un 95 por ciento, disminuyendo significativamente el coste total de los componentes.

Reducir el impacto medioambiental con el aluminio reciclado

Los beneficios medioambientales del aluminio reciclado son sustanciales, incluyendo reducciones en el consumo energético, impactos en la minería, emisiones relacionadas con el transporte y emisiones de dióxido de carbono. En la fundición de aluminio a presión, la mayor parte del consumo energético se produce durante el calentamiento y refundición del metal. Al realizar la refusión internamente, Dynacast puede ahorrar energía, reducir costes y mejorar la eficiencia general del proceso.

Los principales recicladores de aluminio están adoptando cada vez más fuentes de energía renovable y de bajo carbono, como la energía geotérmica, nuclear, solar e hidroeléctrica para fundir chatarra de aluminio.

Responsabilidad Social Corporativa

En los últimos años, las expectativas globales han aumentado para que las empresas operen de forma responsable y reduzcan su impacto medioambiental. Como resultado, muchos fabricantes están implementando iniciativas que apoyan la sostenibilidad y, al mismo tiempo, benefician a sus comunidades locales. Un enfoque eficaz es el uso de aleaciones de aluminio recicladas, que combinan rendimiento con importantes ventajas medioambientales.

Las empresas líderes del sector utilizan cada vez más aluminio reciclado para cumplir ambiciosos objetivos de sostenibilidad , manteniendo al mismo tiempo el rendimiento ligero que se ha convertido en estándar para sus productos finales.

Dynacast recicla toda la chatarra industrial generada como subproducto de sus operaciones, incluido el aluminio, para su uso en futuros proyectos. Este proceso de circuito cerrado evita que los residuos lleguen a los vertederos y reduce los costes de las materias primas para los clientes. Al integrar aluminio reciclado en la producción, Dynacast ofrece soluciones que apoyan tanto la sostenibilidad ambiental como el valor para el cliente.

Aprovecha los beneficios del aluminio reciclado

Más allá del alto rendimiento inherente del material, la fabricación de componentes con aluminio reciclado ofrece beneficios medibles, incluyendo eficiencia energética, reducción de costes y iniciativas reforzadas de responsabilidad social corporativa.