"Somos una startup muy pequeña. Dynacast se aseguró de que pudiéramos llegar al mercado a tiempo." - Andrea Perdomo, Revolar
Un botón mágico
En situaciones vulnerables, la diferencia entre sentirse impotente y estar seguro puede reducirse a una pregunta: ¿con qué rapidez podrías pedir ayuda a alguien si la necesitaras?
La mayoría de la gente lleva smartphones fuera de casa. Pero usar uno para SOS en situaciones inesperadas no es exactamente instantáneo.
Manipular un teclado de llamada, llamar a un número de emergencia y explicar la amenaza potencial puede añadir muchos momentos llenos de adrenalina, sin mencionar la confusión sobre la ubicación exacta de la persona.
Esta complejidad fue lo que llevó a las cofundadoras de Revolar, Jacqueline Ros y Andrea Perdomo—ambas con familiares cercanos que sobrevivieron a un peligro personal traumático—a llegar a una epifanía compartida.
"Si tan solo hubieran tenido un 'botón mágico' que pudieran haber pulsado para avisarnos de que necesitaban ayuda, habrían podido evitar tantas cosas", dice Perdomo.
Y así nació el dispositivo de seguridad Revolar. Enganchado a llaveros, mochilas o bolsos, un clic envía un registro de "todo claro" a los contactos seleccionados, mientras que clics adicionales aumentan la urgencia, para que los contactos puedan ayudar o enviar primeros intervinientes.
La pareja financió su startup, la financió con una campaña en Kickstarter y consiguió financiación externa, antes de conseguir el codiciado espacio en la estantería de su dispositivo de primera generación en Brookstone, Target, Amazon y BestBuy. Pero meses de pruebas revelaron que los consumidores querían un producto de segunda generación con un factor de forma más pequeño y premium que encajara perfectamente en su estilo de vida. Los consumidores querían que el botón se sintiera menos como un dispositivo y más como un accesorio.
Fabricación de moda
Para llegar a las especificaciones ideales, Dynacast llevó a Revolar a través de sesiones de DFM (diseño para fabricación) que cubrían procesos, materiales y acabados.
"Este dispositivo de próxima generación necesitaba una pieza más fuerte", dice Dan Taylor de Dynacast. "Necesitaba una sensación de mayor calidad, que a muchos de nuestros clientes les gusta—esa pieza metálica más pesada en la mano—porque se siente mucho más resistente que las piezas de plástico."
La recomendación de Dynacast fue el zinc, que para aplicaciones de fundición a presión puede hacerse más fino, intrincado y complejo incluso en tamaños increíblemente pequeños.

Diseño hasta el alambre
"Teníamos una 'receta' de emplatado para el acabado de esta pieza, ya fuera arenando, haciendo granaduras con cuentas y luego añadiendo diferentes tipos de cobre-níquel", dice Taylor de Dynacast. Pero Revolar aún no había confirmado el final.
Luego visitaron la planta de Dynacast en Batam, Indonesia, donde revisaron algunas piezas de mando para llaves automotrices que tenían un tamaño similar al diseño de Revolar. Taylor dice: "Les gustaron los componentes, que eran hermosos y pequeños, y el acabado, que era un cromo satinado muy brillante. Dijeron: 'Eso es lo que queremos.'"
Tardó tiempo en comenzar la fabricación de herramientas de fundición a presión, precisamente porque el diseño evolucionaba de forma tan significativa a través de pruebas y pruebas. Andrea Perdomo dice: "Le pedimos a Dynacast que acelerara la producción de herramientas, y otros fabricantes quizá no lo hubieran atendido. Somos una startup muy pequeña. Dynacast se aseguró de que pudiéramos llegar al mercado a tiempo."
Al final, la filosofía de libertad de diseño adoptada por Dynacast fue una gran ventaja; no solo para acomodar plazos ajustados, sino también para la flexibilidad de acabados que Revolar quería, para fabricar un dispositivo que sus clientes estarían encantados de llevar con gusto.
"Nuestro producto es precioso, funcional y asequible", dice Perdomo. "Y es en gran parte por la experiencia de Dynacast."
